Hypnotic on my Heart

Hay libros que tenemos en la lista de pendientes eternamente y nunca nos decidimos a leerlos. Uno de los míos era La canción de Annie, lo quería leer hace mucho porque me lo habían recomendado y además había leído muchos comentarios positivos. Presentía que me iba a encantar, y lo cierto es que me gustó muchísimo y, excepto por algunas cosas de la segunda mitad, me pareció un libro hermoso que todas las fanáticas del romance deberían leer. 

Antes que nada aclarar que este libro es del género romance histórico. La portada da a entender algo totalmente diferente ya que, además de ser muy fea en mi opinión, no refleja en nada lo que trata el libro y mucho menos la época en que transcurre. En este sentido no hay partes "históricas", sino que la historia, sencillamente, se ubica en el año 1890 lo que se traduce a ciertas conductas, creencias, escenarios y vestimentas propias de la época; pero no hay sucesos históricos narrados en el libro.

La novela se basa, en pocas palabras, en una historia de amor totalmente atípica en la que un hombre trata de acercarse, muy lenta y suavemente, a una mujer que ha sufrido y desconoce casi todo de la vida. No hay nada tradicional en este libro. La relación entre los protagonistas empieza, en cierto modo, a la fuerza. No había leído nada semejante y en este sentido me maravilló. Es una historia tan especial y diferente que, sea como sea, te llega de alguna forma. 

Alex es un personaje que me enamoró el 90% del libro. Es un hombre hermoso por fuera y por dentro, es humilde, sencillo y tiene un corazón enorme. Amé su manera tan dulce y delicada de acercarse a Annie, es suave en todos los sentidos. Me encantó que tenga tanto interés por conocerla, por entenderla y por aceptar su forma de ser y sus particularidades. Es pura ternura, por lo que resulta imposible quererlo. Es, sin duda, de estos protagonistas que te hacen desear meterte en el libro y .... ♥ Ahora bien, el 10% que no me gustó de Alex tiene que ver con esos detalles de la segunda mitad del libro que no me convencieron. Esto tiene que ver, más que nada, con actitudes que tiene él y no me gustaron porque las sentí un poco contrarias a su personalidad en el resto de la trama y me chocaron bastante. 

Annie, por su parte, es una protagonista única. Por esas dificultades que mencioné al comienzo es casi como una niña en el cuerpo de una mujer. La mayor parte del libro actúa como un animalito asustado que no comprende muchas cosas y teme, también por lo que le pasó, el contacto o acercamiento de algunas personas. Tiene actitudes y comportamientos que generan mucha compasión y una absoluta ternura. Es maravillosa. Y lo más hermoso de todo es ver cómo se va abriendo a Alex a pesar de que teme muchas cosas y cómo va creciendo entre ellos un amor tan pero tan especial y dulce. Es hermoso ver, también, cómo va creciendo como persona, es un personaje que cambia y madura mucho. La Annie del comienzo es muy diferente a la del final. Quizá su comportamiento respecto a cierta cuestión en particular, sobre el final, es un poco intenso pero tampoco es algo que quede mal en el libro. 

El romance en este libro queda claro que es hermoso, no solo por la ternura de los personajes y las situaciones tan especiales que se dan entre ellos, sino por que es un romance muy original y diferente a lo que se suele ver en el género. Es, además, un romance que crece muy muy lento, paso a paso, detalle a detalle; y esto lo hace más bonito aun. La parte "sexual" del libro tiene todo un peso importante y cada momento tiene un sentido especial.

Hay personajes secundarios en el libro que tienen cada uno su peso. Destacan la ama de llave de Alex que es maravillosa y aporta mucho a la trama, y los padres de Annie que son seres despreciables la mayor parte del libro y te hacen querer gritarles unas cuantas barbaridades.